Los trenes recorren cada año miles de kilómetros y, con ello, sus ruedas sufren desgastes e irregularidades que deben corregirse de forma periódica. Si no se actúa a tiempo, estos defectos afectan al rendimiento del vehículo y pueden comprometer la seguridad en la circulación. Los tornos de foso son la solución que permite recuperar el perfil original de las ruedas directamente sobre el eje, sin necesidad de desmontajes.
En Caldepar, apostamos por la innovación y la calidad en cada uno de nuestros proyectos. Nos especializamos en ofrecer soluciones a medida en calderería y mecanizado industrial, desarrollando piezas y equipos que responden a las más altas exigencias del sector ferroviario.
¿Qué son los tornos de foso?
Un torno de foso es un equipo especializado de mecanizado que se utiliza en el sector ferroviario para el reperfilado de las ruedas de los trenes. Su objetivo es devolver a la rueda su perfil original, corrigiendo desgastes, ovalizaciones o irregularidades que aparecen con el uso.
La principal ventaja de este equipo es que permite realizar el mecanizado con las ruedas montadas en el eje, sin necesidad de desmontar elementos como las cajas de grasa. Esto reduce considerablemente los tiempos de mantenimiento, abarata costes y disminuye el tiempo de inactividad de los vehículos.
Existen distintos modelos de tornos de foso que se adaptan a varios parámetros técnicos: ancho de vía, diámetro de rueda y carga máxima por eje. Además, los más avanzados incorporan sistemas automatizados que pueden tornear una composición completa sin intervención del operario en el movimiento del tren.
Construcción y montaje de tornos de foso para el sector ferroviario
Los tornos de foso son equipos de gran robustez que se construyen con estructuras capaces de soportar las elevadas cargas que transmiten los trenes durante el mecanizado. No se fabrican de forma estándar, sino que se adaptan a las características de cada taller ferroviario, de modo que encajen con sus condiciones de trabajo.
En este diseño a medida se tienen en cuenta aspectos clave como:
- El tipo de material rodante: no es lo mismo un torno destinado a trenes de alta velocidad, a locomotoras de mercancías o a unidades de metro y tranvía. Cada caso requiere capacidades técnicas específicas.
- El volumen de operaciones de mantenimiento: los talleres con gran flujo de revisiones necesitan equipos preparados para trabajar de manera intensiva y continua, mientras que en otras instalaciones puede primar la versatilidad frente a la capacidad de producción.
Gracias a esta personalización, el torno de foso ofrece un rendimiento óptimo en el entorno concreto en el que se instala.
Ventajas de los tornos de foso en el mantenimiento ferroviario
A continuación, se detallan las principales ventajas de los tornos de foso:
Eficiencia en el mantenimiento
Los tornos de foso permiten mecanizar las ruedas directamente sobre el eje, evitando procesos de desmontaje largos y costosos. Esto se traduce en revisiones más rápidas y una reducción significativa del tiempo de inmovilización de los trenes.
Ahorro de costes
El reperfilado prolonga la vida útil de las ruedas al recuperar su forma original, retrasando su sustitución. De esta manera, se reducen los gastos sin comprometer la seguridad.
Mayor seguridad
Conservar el perfil correcto de la rueda asegura un buen contacto con el carril. Esto mejora la adherencia, reduce vibraciones y ruidos, y contribuye a una circulación más estable y segura para pasajeros y mercancías.
Versatilidad
Estos equipos se adaptan a distintos tipos de vehículos ferroviarios, desde trenes de alta velocidad hasta tranvías, metros, locomotoras o vagones de mercancías.
¿Necesitas optimizar tus procesos de mantenimiento ferroviario? En Caldepar desarrollamos tornos de foso adaptados a cada taller, con la precisión y el rendimiento que exige el sector. ¡Ponte en contacto con nosotros y estudiaremos tu proyecto a medida!